La alpaca originaria habita en la zona alto-andina de Perú, al sur del país, de donde se obtiene la fibra que se comercializa. Las características de su lana la convierten en una de las más apreciadas del mercado textil mundial.
Perú cuenta con el 89% de la población mundial de alpacas, pero existen otros camélidos como la llama, el guanaco o la vicuña. La exclusividad de la alpaca radica en que existen menos de 6 millones de estos animales en el mundo, frente a los aproximadamente 50 millones de cabras de Cashmere o los 1.500 millones de ovejas.
Las extremas temperaturas en la región sur de Perú, que pueden variar entre -20ºC y 20ºC en un solo día, la alta radiación solar, la menor concentración de oxígeno en el aire y los fuertes vientos han obligado a las alpacas a desarrollar un vellón fino, ligero, impermeable y muy resistente a la radiación.
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